martes, 14 de diciembre de 2010

Previsible gran subida de la electricidad en enero.

La Tarifa de Último Recurso (TUR) de la luz puede subir en enero el 9,9% después de que la decimotercera subasta entre comercializadoras de último recurso (Cesur) y los ajustes técnicos posteriores hayan arrojado un alza del 21,3% en el coste de la energía con respecto a los resultados de octubre.

La subasta para los próximos tres meses ha fijado el precio del producto de carga base en 49,07 euros el Megavatio hora (MWh), frente a 46,94 euros de la subasta anterior, y en 53,99 euros el MWh el precio de cierre del producto punta, frente a 53 euros a que se estableció en la subasta de septiembre.

El resultado de la subasta Cesur es uno de los componentes económicos que establecen el cálculo de la tarifa de último recurso (TUR), la única que fija el Gobierno desde el 1 de julio de 2009.

Un resultado que está el línea con las previsiones del presidente de la patronal eléctrica Unesa, Pedro Rivero, quien aseguró recientemente que los mercados de futuros indicaban que el resultado de la subasta que determina el coste de la energía estará entre un 4 y un 5% por encima de los precios obtenidos en la celebrada para fijar las tarifas del cuarto trimestre.

El importe final de la TUR, a la que pueden acogerse los consumidores que tengan contratada una potencia inferior o igual a 10 kilovatios (kW), dependerá fundamentalmente del resultado de esta subasta, que se ha adjudicado a 22 vendedores, ya que el Ministerio de Industria propone no subir en enero los peajes de acceso, que fija el Gobierno y que representa cerca de la mitad del recibo eléctrico.

Los peajes o las tarifas de acceso, que pagan todos los consumidores de electricidad, remuneran los costes regulados del sistema eléctrico, como las primas a las renovables, el transporte o la distribución.

En el documento remitido a la Comisión Nacional de Energía (CNE), el ministerio que dirige Miguel Sebastián, proponía mantener las tarifas de acceso a las redes de transporte y distribución tanto para los grandes como para los pequeños consumidores.

Sin embargo, mantener los peajes no significa que no vaya a subir el recibo de la luz para los hogares y pymes acogidos a la tarifa eléctrica de último recurso.

En la pasada subasta, efectuada en septiembre, a pesar de que el coste de la electricidad se encareció entre un 5,48 para la tarifa valle y un 4,99% para el producto punta debido al alza en el precio de los combustibles y al aumento de efecto estacional del invierno, la tarifa eléctrica de último recurso, a la que pueden acogerse más de veinte millones de hogares y pymes, subió un 4,8% en octubre.

A finales de junio, Miguel Sebastián, y el portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, llegaron a un acuerdo para no aplicar la subida de la luz prevista para julio, lo que obligó al Ejecutivo a mantener o incluso bajar los peajes en contra de su propuesta inicial.

Una decisión que no contó con el visto bueno del sector eléctrico, que defendía un incremento de la factura de la luz para hacer frente al déficit de tarifa, la diferencia que se produce cuando los ingresos del sistema vía tarifa no son suficientes para cubrir los costes, que a finales de 2009 superaba 14.600 millones de euros y que ahora soportan las cuentas de las compañías eléctricas.

Fuente: La Vanguardia

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